miércoles, 19 de septiembre de 2012

Por lo bajo


No digas nada, vení
te voy a contar por lo bajo
la furibunda revolución.

No digas nada,
pero el sol ya no calienta
es frío y lejano.

No digas nada pero,
el viento ya no gime,
sino que es callado e inerme.

Te voy a contar un secreto
la lluvia ya no cae,
se desploma.

Mi mundo, mi entero mundo
se paralizó.
Se hundió en la vorágine de la revolución.

He nacido, otra vez.

La primavera volvió a florecer
porque ya no brilla por sí mismo el sol
sino que yo lo hago brillar,
yo decido mis días y mis noches
            pero no digas nada.
El viento ya no grita,
porque he decido escuchar los gritos
            que valen
y si no gritan por amor, perecen en silencio.
            Pero aun no digas nada.
La lluvia dejó de caer y el mundo se detuvo
ya no gira ni se arremolina, solo comparece.
El orbe se despobló, ya no hay personas
sino pálidos rostros, sin forma ni objeto
sino un bulto amorfo que nada significa.

Pero no digas anda, amor mío
que por lo bajo te confieso
que he vuelto a nacer.