"Tema para un cuento: alguien que tiene el poder de materializar algunas palabras pero no sabe cuáles. Es así, como en cualquier instante, en cualquier conversación trivial o importante una palabra hace aparecer el objeto que designa. La última hará aparecer, naturalmente, a la muerte. La desesperación de este ser, su temor de decir y hablar, pues ignora absolutamente si lo que encarnará será una presencia dulce o terrorífica. […] Pero es esta extraña persona la que debe pronunciarlas, porque el cuento tiene que describir, justamente, su temor a hablar."
Extracto del diario de Alejandra Pizarnik
29 de Julio de 1962
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